No te preocupes si aún no sabes hacer un anillo mágico y te quieres poner con tu primer amigurumi ¡ya!, porque hay otros métodos más sencillos para empezar mientras coges soltura con el anillo mágico. Estos métodos son:
- El método de las 2 cadenas (o nudo corredizo), ideal para hilos finos
- El anillo de cadeneta; como se ha hecho siempre tradicionalmente
Estos métodos, no solo son más sencillos, sino que en algunas ocasiones, son más apropiados que el anillo mágico. Por ejemplo, cuando tejas con un hilo muy fino o el número de puntos de la primera vuelta sea muy bajo.
A continuación, paso a explicarte cada uno de ellos.
El método de las 2 cadenas
Como ya te he avanzado antes, este método es el ideal para empezar en el mundo amigurumi y siempre que trabajemos con hilos muy finos o montemos pocos puntos.
Consiste en hacer una cadeneta de 2 cadenas, de tal manera que el nudo corredizo del inicio se apriete con el cabo que nos queda y no con el hilo de trabajo. Después montaremos los puntos bajos que nos pida el patrón, habitualmente 6, dentro de la primera cadena, pillando por detrás el cabo.
Para finalizar, apretamos tirando del cabo y lo aseguramos por el revés con una aguja, ya que tiende a abrirse.
Para que quede más claro, a continuación te lo muestro con unas imágenes:
- Hacemos un nudo corredizo de tal manera que se cierre tirando del cabo y no del extremo de trabajo
- Tejemos 2 cadenas
- Introducimos la aguja en la primera cadena y sacamos el hilo
- Tejemos los puntos indicamos en esa cadena, perdiendo el cabo por detrás
- Tejemos la segunda vuelta y apretamos tirando del cabo
- Vista del revés. Para asegurarnos de que no se abra un agujero podemos anudar el cabo con una aguja tapicera (sin punta)
El anillo de cadenetas
Este método consiste en hacer una cadeneta de 3 o 4 cadenas y cerrarla, enganchando en la primera cadena con un punto raso. De esta manera, se forma un anillo de cadenas dentro del que montaremos los puntos bajos que nos pida el patrón.
Este sistema se utiliza en el crochet tradicional para trabajar en redondo, pero en ese caso no importa que quede flojo. Al utilizarlo para los amigurumis tienes que asegurarte de ajustar el número de cadenas necesario, que variará según lo apretadas que las hagas y el número de puntos que tengas que montar dentro, ya que no queremos que después se vea el relleno.
Te recomiendo también que vayas perdiendo el cabo detrás de los puntos y que lo aprietes al final, aunque no demasiado porque si no los puntos se abultarán. Po último, asegura el hilo con una aguja para que no se te afloje.
Y como en el caso anterior, a continuación te muestro unas imágenes aclaratorias
- Hacemos una cadeneta de 4 cadenas, porque vamos a tejer 6 puntos bajos en la primera vuelta
- Unimos con la primera cadena con un punto raso o deslizado para formar un anillo
- En el anillo que se forma tejemos los 6 puntos bajos, perdiendo el hilo por detrás
- Tejemos la segunda vuelta y apretamos tirando del cabo
- Vista del revés. Para asegurarnos de que no se abra un agujero podemos anudar el cabo con una aguja tapicera (sin punta)
Por último, podemos comparar el resultado final de ambos métodos. Practícalos para sentirte cómoda y conocerlos, y con la experiencia podrás usar uno u otro cuando el anillo mágico no sea lo más indicado: